jueves, 17 de septiembre de 2009

CCC® (Courmayeur Champex Chamonix) 2009 (II de II)

La subida al Grand Col Ferret se me hace eterna, el calor nos castiga de lo lindo y me propongo marcarme un ritmo de lo más cómodo para llegar al collado y no tener que parar.
Se monta un trenecito detrás de mi de lo más curioso, nadie habla, todos jadean y de vez en cuando algún espectador Italiano nos anima como si fueses el primero en pasar por allí. La concentración es máxima, me encuentro genial
.
Llego al collado con muy buenas sensaciones y me lanzo a buen ritmo y sin parar hacia La Fouly.
La bajada tiene tela y hay tramos en los que no es posible no correr. Son 19 kms hasta Issert casi sin parar de bajar, pero es el único tramo en el que ganar tiempo a los cortes.
Llego a La Fouly y decido parar un rato para estirar y darme un leve masaje. Me quedo un poco frio y salgo coririendo hacia Issert donde me espera Mari Jose.
El paisaje las gentes y las poblaciones Suizas nos recompensan constantemente, el ambiente no decae en ningún momento
.
Llego a Issert con el subidón de ver a mi angel de la guarda, un poco de charleta y sigo para afrontar la subida a Champex.
Km 54.7 Champex-Lac, punto importante y estratégico. Paro a cenar y a cambiarme de ropa. Chequeo general de ampollas y rozaduras varias. En este punto también está Mari Jose que me ayuda en todo.
Aunque empiezo a notar el cansancio en general me encuentro bastante bien, las lesiones me respetan pero yo las sigo mirando de reojo.
Comienza la noche, momento duro para mi, decido no ponerme la lentilla y concentrarme mucho en cada paso para no tropezar demasiado
.
Dejo a MJ con un poco de pena y salgo hacia La Bovine, subida muy dura, peldaños altos muy exigente física y técnicamente. El frío nos envuelve cada vez más y la cosa se pone dura de verdad. A tirar de poderío mental y a no pensar demasiado.
La bajada a Trient es también muy técnica pero se puede correr. Llego a Trient bastante cansado pero con la moral intacta, se que tego la carrera en el bolsillo, me quedan dos subidas y dos bajadas, duro pero posible.
Penultima subida, Catogne, después de La Bovine... esto es mucho más llevadero. Corono entre la niebla y copos menudos de nieve. El frio es importante y no creo que superemos los 2 grados. No veo más allá de dos metros y voy solo, llega por detrás un Frances y vamos juntos un rato... tremendo, duro, muy duro.
Llegamos a un controlm en el que nos dan ¡¡¡te caliente!!!, increible, me pongo las pilas y tiro a Vallorcine.
Las imágenes de gente abandonando, durmiendo en los costados de los caminos, vomitando e incluso llorando son constantes, todo los que por ellos pasamos les preguntamos e intentamos ayudarles, pero hay que seguir. Creo que este es un aspecto de la carrera de los más duros, os lo puedo asegurar.
La bajada a Vallorcine me emociona, se que tengo la carrera, lo estoy logrando, como diría Homer "Juhuuuuuu..."
Veo de nuevo a MJ y nos despedimos hasta meta, joder que bien suena esto.
Me vacío en la tremenda, técnica y bella subida a La Tete Aux Vents. Ya ha amanecido y voy más rápido.
Los 1121 metros de desnivel de bajada hasta Chamonix son... sin comentarios, probadlo y me lo decís.
Km 96, entro en Chamonix, la gente se deshace en elogios y ánimos, miran tu nombre en el dorsal y personalizan el grito que te dedican. Dos kilómetros de gloria que me han costado 24 horas y media de esfuerzo y muchos meses de lucha lágrimas y recuperaciones.
Aunque en la foto de meta no lo refleje, estoy feliz, estoy emocionado y estoy agradecido. Agradecido a Mari Jose por todo lo que me ha ayudado en estos dos últimos y nefastos años, agradecido a la organización por organizar tan maravilloso evento y por supuesto agradecido al público tan maravilloso que abarrota todo el recorrido.
Estos dos últimos kilómetros han sido sin duda los minutos más importantes de mi vida deportiva.




viernes, 4 de septiembre de 2009

CCC® (Courmayeur Champex Chamonix) 2009 (I de II)

Bajarte del coche en la localidad Francesa de Argentiere y tenernos que abrigar, fue una
de las mejores sensaciones, pero no la única, que nos esperaban en nuestra visita a Alta Savoya.

Aquí nos vemos con Pedro, Ana y Sergio que nos reciben con su moreno de varios dias ya de pateo por los maravillosos Alpes.

Tras una noche de lluvia espectacular que nos hace temblar de miedo con vistas hacia el Viernes, dia de la carrera, nos levantamos para ir a por el dorsal y entrar en materia.

La organización, como no podía ser de otra manera, espectacular. Recogemos todo, y el dorsal y la pulserita que te colocan como participante de una de las cuatro pruebas, nos da una descarga de emoción indescriptible.
Esa misma tarde nos vamos de vinos con Jonas que está currando en Chamo, y le quitamos un poco de tensión al tema.
Tras otra noche de lluvia más leve, Mari Jose y yo nos despedimos de Sergio, Ana y Pedro para pasar a la zona Italiana desde donde sale mi carrera, Courmayeur.
Mi carrera, la CCC® (Courmayeur Champex Chamonix), se trata de recorrer 98 Km´s de montaña con 5.505 m de desnivel + y 5.690 m de desnivel -, en tan solo 26 horas como tiempo máximo, y con cortes horarios que dejan que te duermas lo más mínimo.

Viernes 28 de Agosto, dia "D", nos levantamos, y tras un leve desayuno rodeados de corredores, nos vestimos de gladiadores y salimos a las calles del delicioso Courmayeur. El ambiente es espectacular, miles de personas invadiendolo todo, sinfonía de colores y emociones descomunal (no me pongo tonto es que de verdad que es así...).
Tras despedirme de Mari Jose, he de decir que un poco emocionado, me inserto en el amasijo de chalaos multicolor que es la salida. No se lo que están diciendo por megafonía, pero sólo el tono del speaker y el griterío de la gente hacen que me entre un algo en el estómago.
La salida es espectacular, veo gente en el público que llora y no uno ni dos aislados. La música de Vangelis está a la altura del momento, sólo por este momento ya ha merecido la pena venir.

Tras salir de Courmeyeur pasamos por La Saxe y Entréves, en un recorrido por asfalto que elonga el pelotón poco a poco. El terreno pica poco a poco hacia arriba hasta llegar a Planpincieux donde giramos para comenzar en serio a subir hasta el refugio Bertone. La subida se lleva bien de no ser por algún tolai que decide que el resto somos muy lentos y que el va a por el podio, en fin...

Al llegar a Bertone tengo que parar a curarme la primera de las ampollas en mi tendón de aquiles, empezamos de PM. Continúo hacia la Tete de la Tronche con un calor descomunal, somos demasiados todavía y hay que tener cuidado con los bastones. Tras una subida con unas vistas espectaculares de la cara Italiana del Macizo del Mont Blanc, nos lanzamos en busca del segundo avituallamiento en el refugio Bonatti, en una agradable bajada y luego sube-baja que nos deja maravillarnos con el espectáculo.
Al llegar a Bonatti, logro hablar con Mari Jose para describirla mis sensaciones. He salido con la cintilla iliotibial tocada y no sabemos como va a responder en las bajadas, de momento me molesta un poco pero es soportable.
Salgo de Bonatti tras hacer una primera parada de control de pies y de estiramientos serios. Recorremos un terreno en el que se puede correr pero con tiento, ya que estamos tan solo en el Km 24.
Llego a Arnuva donde, ante mi sorpresa, hay un montón de gente animando, esto es increible, el ambiente es de flipaaaaaaaarr.. (con entonación de Chiquito de la Calzada).
Tras alimentarme y llenar mi bolsa de hidratación, salgo hacia el Gran Col Ferret. 768 m de desnivel en 4,5 km. Para mi, aquí empiezó la carrera.